Vigilias (maitines)
Oficio del final de la noche, según la regla benedictina. Es parte esencial de nuestra vocación de vigilantes. En efecto, con esta plegaria matinal respondemos a la petición del Señor de vigilar para no ser sorprendidos por su retorno. Se recita recto tono, comienza todos los días por el salmo 94 que invita a todos los fieles a venir a adorar a Dios. En singular, una vigilia designa al día que precede a una gran fiesta litúrgica.