¿Podéis ver a vuestra familia de vez en cuando?
Generalmente, no. Después de la ordenación sacerdotal, disponemos de una semana para celebrar las primeras misas. Pero nuestras familias pueden venir a vernos tres o cuatro veces al año y podemos escribirles. Nuestros seres queridos, sobre todo, están muy presentes durante nuestras plegarias.